Disponer de equipo de diagnosis es fundamental para dar un servicio de calidad en el taller de coches en Fuenlabrada. Y entre esos equipos de diagnosis con los que contamos está el frenómetro, que en una definición muy simple es un aparato que sirve para medir esencialmente la eficacia de la frenada, el estado de los discos y otros parámetros vitales en la seguridad en la conducción.
La mayoría de talleres de vehículos comprueban el estado de los frenos de manera visual, solo haciendo mediciones cuando hay algo que falla en los mismos. Pero en los Talleres Sanburauto disponemos de frenómetro, que sirve para medir y diagnosticar el perfecto funcionamiento o fallos en las fuerzas de frenado, parásitas, asimetría por eje, eficiencias parciales y totales, desaceleración y freno de mano.
Hay que tener en cuenta que la eficacia de frenado es muy difícil de medir por el conductor, que puede notar ciertos fallos en un momento dado, pero no si los frenos están funcionando como deberían y podrían hacerlo mejor. El frenómetro se encarga de examinar precisamente esa eficacia, que se calcula en función del peso del automóvil y la fuerza máxima de frenado de las cuatro ruedas, eje por eje, al pisar el pedal de freno el conductor hasta la situación límite de bloqueo.
En el taller de coches en Fuenlabrada consideramos que esa eficacia admisible y recomendada, tanto por los fabricantes como por los organismos de seguridad, debe ser igual o superior al 60% para el equipo de frenos de servicio, e igual o superior al 20% para el freno de estacionamiento, de forma que si alguno de estos parámetros en el frenómetro son incorrectos, se recomienda la sustitución de los frenos, por cuestiones de seguridad.